La papaya es una fruta tropical de forma ovalada y piel delgada y suave que puede ser de color amarillo, naranja o verde, dependiendo del grado de madurez. Su interior está lleno de pequeñas semillas negras y una pulpa de textura suave y dulce, que puede ser de color amarillo, anaranjado o rojizo, también dependiendo del grado de madurez.

Causas

Una alergia alimentaria a la papaya ocurre cuando su sistema inmunitario identifica erróneamente una proteína que se encuentra en la piel y la carne de la papaya como una amenaza y crea anticuerpos en una reacción contra ella. Estos anticuerpos hacen que su cuerpo exhiba ciertos síntomas en un intento de eliminar la proteína que causa el daño. Estos síntomas pueden variar de leves a potencialmente mortales.

Síndrome de alergia oral

La alergia a la papaya generalmente ocurre como resultado del síndrome de alergia oral. Como explica el Hospital de Niños de Filadelfia, el síndrome de alergia oral ocurre cuando se produce reactividad cruzada entre las proteínas vegetales y el polen de ciertas frutas o verduras. Esto hace que las proteínas en esas frutas y verduras parezcan similares a la proteína original de la planta. Cuando el sistema inmunitario tiene una reacción alérgica a una proteína vegetal específica, también puede tener una reacción a las frutas y verduras que contienen proteínas similares. Las personas con alergia al látex pueden tener una alergia de reacción cruzada a la papaya.

Síntomas

Los síntomas generalmente ocurren varios minutos después de comer papaya, pero pueden tardar hasta varias horas en aparecer. Según el Hospital de Niños de Filadelfia, el síndrome de alergia oral «se limita a los labios, la boca y la garganta». Los síntomas comunes incluyen picazón o irritación en la boca o la garganta e hinchazón alrededor de los labios. En casos severos, también puede ocurrir hinchazón de la garganta, lo que puede causar dificultades para respirar. Si experimenta hinchazón de la garganta, busque tratamiento médico de emergencia.

Diagnóstico

Si sospecha que tiene alergia a la papaya, programe una cita con su médico para un diagnóstico oficial. Proporcione un historial detallado de sus síntomas junto con un diario de hábitos alimenticios generales. Es probable que su médico realice una prueba cutánea. Como explica MayoClinic.com , el médico pincha su piel con una aguja y permite que una pequeña muestra de la sustancia sospechosa se filtre debajo de la superficie de la piel. Luego observa si hay un golpe u otra reacción en la piel. También puede realizar un análisis de sangre para detectar anticuerpos de tipo alérgico, llamados anticuerpos de inmunoglobulina E. El sistema inmunitario envía estos anticuerpos al torrente sanguíneo cuando se produce una reacción alérgica.

Otros disparadores potenciales

Según el Sydney Children’s Hospital en Australia, casi el 40 por ciento de los pacientes con alergia al látex tienen alergias alimentarias a la papaya y otras frutas. Otros delincuentes comunes incluyen aguacate, plátano, maracuyá, melón, mango, kiwi, durazno y piña. El Departamento de Salud del Estado de Nueva York también enumera varios delincuentes no fructíferos, como zanahorias, apio, papas crudas, castañas y avellanas.

Tratamiento y Prevención

El mejor tratamiento para una alergia a la papaya es la prevención. Evite comer o entrar en contacto con la papaya tanto como sea posible. Cocinar papaya a menudo altera químicamente las proteínas dañinas lo suficiente como para prevenir los síntomas en personas con alergia leve o moderada, pero consulte a su médico antes de intentar consumir papaya de cualquier forma. Si come papaya y experimenta síntomas leves, un antihistamínico de venta libre puede reducir su malestar. Si se produce una reacción grave, es posible que necesite una inyección de epinefrina para detener el avance de sus síntomas.

Intolerancia a la papaya

La intolerancia a la papaya y la alergia a la papaya son dos afecciones diferentes que pueden causar diferentes síntomas.

La intolerancia a la papaya es una afección en la que una persona tiene dificultad para digerir la papaya debido a una falta de enzimas digestivas necesarias para descomponer los azúcares en la fruta. Esto puede causar síntomas gastrointestinales como dolor abdominal, hinchazón, gases, diarrea y náuseas. La intolerancia a la papaya no es una reacción inmunológica, por lo que no es considerada una alergia.

Por otro lado, la alergia a la papaya es una reacción inmunológica a los componentes de la fruta. Los síntomas pueden ser leves o graves e incluyen picazón, urticaria, hinchazón de la cara, labios o lengua, dificultad para respirar, anafilaxia e incluso shock anafiláctico.

FUENTES